La autorización sanitaria de este tipo de locales se evalúa periódicamente y se cancela de presentar irregularidades en la inspección.
(Agraria.pe) El Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) y la Policía Fiscal, realizaron una inspección inopinada a los establecimientos comerciales de plaguicidas de uso agrícola, ubicados en el Kilómetro 22 de la avenida Túpac Amaru en Carabayllo, para verificar la venta de productos certificados en la zona.
En los establecimientos autorizados por Senasa en dicha zona verificaron las condiciones de venta de plaguicidas de uso agrícola, el certificado de autorización, los servicios a tiempo completo de un asesor técnico (ingeniero agrónomo o biólogo que maneje el uso adecuado de plaguicidas).
Asimismo, se verificó los productos de ingreso legal al país, con período de vigencia y que se encuentren en sus envases originales.
Los técnicos de la institución responsable de la inocuidad agroalimentaria verificaron que la venta de productos de etiqueta roja (extremada y altamente peligrosos) se realice con la participación del profesional responsable del establecimiento y con prescripción sanitaria de un ingeniero agrónomo. Sin este documento no está permitida su comercialización.
Se recuerda que la ubicación de los plaguicidas en los anaqueles es abajo los líquidos y arriba los de polvo, ello evita que en caso de derrame se mezclen y generen vapores que puedan ser inhalados por las personas o animales.
La autorización sanitaria de este tipo de locales se evalúa periódicamente y se cancela de presentar irregularidades en la inspección.
Además, los locales deben contar con arena, aserrín, paños para aislar la zona de derrame, contenedores de agua para el lavado en caso de derrames y evitar el contacto del producto con la piel y ojos.
No se debe comprar productos plaguicidas adulterados porque pueden perjudicar la salud y economía de los agricultores, ocasionar mayor resistencia de la plaga en los cultivos y perder eficacia. No adquirirlos en locales comerciales de dudosa procedencia, ni almacenar productos vencidos.
La iniciativa busca prevenir los riesgos que pueden ocasionar los plaguicidas en la salud de las personas y perjudicar el rendimiento de sus campos de cultivo.
